El guerrillero y poeta guatemalteco torturado al ritmo de su poema

Otto René Castillo fue el poeta guatemalteco que sufrió la tortura de las fuerzas antiguerrilleras a la par de su poema Vámonos patria a caminar.

 

Cuentan que lo llevaron a la base militar de Zacapa y al momento de ser torturado: 

 "Con una gillette asegurada en una varita de bambú, atado de pies y manos, le cortaban la cara a cada frase que le decían (basándose en el poema Vámonos patria a caminar:'Yo me quedaré ciego para que tengas ojos, Yo me quedaré sin voz para que tú cantes'). Le gillettearon los ojos, la boca, las mejillas, los brazos y el cuello”.

Después, lo mutilaron y lo quemaron vivo.

Vámonos patria a caminar.

Vámonos patria a caminar, yo te acompaño.
Yo bajaré los abismos que me digas.
Yo beberé tus cálices amargos.
Yo me quedaré ciego para que tengas ojos.
Yo me quedaré sin voz para que tú cantes.
Yo he de morir para que tú no mueras,
para que emerja tu rostro flameando al horizonte
de cada flor que nazca de mis huesos.

Tiene que ser así, indiscutiblemente.

Ya me cansé de llevar tus lágrimas conmigo.
Ahora quiero caminar contigo, relampagueante.
Acompañarte en tu jornada, porque soy un hombre
del pueblo, nacido en octubre para la faz del mundo.
Ay, patria,
a los coroneles que orinan tus muros
tenemos que arrancarlos de raíces,
colgarlos de un árbol de rocío agudo,
violento de cóleras de pueblo.
Por ello pido que caminemos juntos. Siempre
con los campesinos agrarios
y los obreros sindicales,
con el que tenga un corazón para quererte.

Vámonos patria a caminar, yo te acompaño.

Otto René Castillo nació en Quezaltenango Guatemala en 1936. A sus dieciocho años ya a era presidente de la Asociación de Estudiantes de Post-primaria y uno de los activistas juveniles más destacados del Partido Guatemalteco del Trabajo mas, por su oposición al golpe de estado contra Jacobo Arbenz perpretado por la CIA, sufre el destierro de  Guatemala. Posteriormente se traslada a El Salvador donde comienza a escribir sus poemas y en 1955 gana el Premio Centroamericano de Poesía de la Universidad.

Con un espíritu vital, fuerte carácter y sueños por reparar el dolor de su pueblo, en especial los más explotados: las masas indígenas que le animan a volver a su pueblo, en 1957 regresa a Guatemala tras su exilio. En 1964 vuelve a la turbulenta mezcla de militancia política y actividad cultural por lo cual es nombrado representante de Guatemala por organizaciones revolucionarias en el Comité Organizador del Festival Mundial de la Juventud en Argelia, con lo que recorre Alemania, Austria, Hungría, Chipre, Argelia y Cuba.

En 1966 regresa clandestinamente a Guatemala y se une a las guerrilas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR). El 19 de marzo de 1967 es herido tras un combate y capturado por las fuerzas antiguerrilleras del gobierno quienes le propinaron una tortura que duró cinco días junto con trece campesinos al final quemados.

Gracias a Otto René Castillo se abrieron amplias perspectivas para aumentar el nivel cultural del público rural, muchas organizaciones de escritores y artistas jóvenes como el Círculo Literario Universitario que tenía tanto la función de ser organismo de difusión cultural como de organizador de los jóvenes creadores universitarios. Castillo invadió las páginas de las revistas y diarios locales, dictó conferencias, polemizó temas, planteó mesas redondas, hizo finalmente una vida militante y bohemia.

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